Lugar de encuentro por excelencia en la noche cruceña, la Avenida Monseñor Rivero se ha convertido en "el Boulevard" de Santa Cruz, la arteria más concurrida por la población cruceña y los visitantes que buscan departir en alguno de sus atractivos cafés y restaurantes, donde se puede disfrutar de solaz y grata compañía, saboreando diversas opciones de una rica oferta gastronómica.
Hasta hace algunas décadas, esta avenida era la puerta de ingreso a la ciudad desde las provincias del Norte, a partir del monumento al Cristo Redentor, levantado para conmemorar el IV º Congreso Eucarístico de la Iglesia Católica en la década de 1960.
Hoy en día la zona se ha transformado completamente con la apertura de innumerables cafeterías y heladerías, en una zona comercial y a la vez residencial, que se inicia en lo que fue la gran Rotonda del Cristo y concluye en la arbolada Plaza del Estudiante, rodeada de condominios, tiendas y bancos, donde también se yerguen el Palacio de Justicia y la Biblioteca Municipal.